Blockchain: qué es y cómo funciona

Blockchain: qué es y cómo funciona

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Todo el mundo hoy en día habla de “blockchain”, pero ¿sabemos realmente lo que designa este término y por qué es tan importante en el sistema económico actual?

El mundo de la tecnología está íntimamente conectado con el de la economía tanto que, los cambios que se registran en uno afectan directamente el otro. La disrupción de la tecnología ha transformado profundamente la economía, impulsando un cambio radical en tan solo veinte años.

Pensamos en cómo la llegada de internet ha revolucionado la economía, las transacciones económicas, los modelos empresariales, la forma de compra y venta y muchos otros ámbitos.

El blockchain es una de estas “nuevas tecnologías” que han transformado profundamente la economía global.

 

Pero ¿qué es el blockchain?

El blockchain, o cadena de bloques, es “un registro único, consensuado y distribuido en varios nodos de una red”, es decir es un gran registro digital en el cual la información está agrupada en bloques encadenados y en orden cronológico.

El blockchain fue creado en 2009 por un grupo de personas que utilizan el seudónimo: Satoshi Nakamoto. Dicha creación está relacionada con el nacimiento de la criptomoneda Bitcoin.

 

Una cadena de bloques es una serie de registros inmutables con datos que tienen marcas de tiempo que están administradas por un grupo de ordenadores que no son propiedad de una sola entidad. Cada uno de estos bloques de datos está asegurado y están unidos entre sí utilizando principios criptográficos, formando así una cadena continua de bloques cuyas posiciones son inmutables.

Se trata de una enorme base de datos compartida a la que se le pueden enlazar otros bloques en cualquier momento y que son accesibles por todos.

 

Los 3 pilares del blockchain

Descentralización.

Antes de la llegada del blockchain estábamos acostumbrados a pensar en las bases de datos como sistemas centralizados donde una sola entidad almacenaba todos los datos y para acceder a ellos había que interactuar con dicha entidad.

 

En un sistema descentralizado, la información no está almacenada por una sola entidad, sino que está contenida en toda la red.

Una red descentralizada permite por lo tanto intercambiar información sin pasar por terceros, es decir de forma directa. Y esta era la idea subyacente de la criptomoneda Bitcoin: poder efectuar transferencias de dinero directamente, sin pasar por un banco, por ejemplo.

 

Un sistema transparente y democrático.

La revolución introducida por el blockchain reside en su transparencia.

A partir del momento en que la red de bloques en cadena no tiene una autoridad centralizada, ésta se configura como un sistema democratizado por excelencia. Además, siendo un database compartido e inmutable, la información contenida es “abierta” y puede ser consultada por todo el mundo. Por lo tanto, todo lo que se “almacena” en la cadena de bloques es por su propia naturaleza transparente y todos los sujetos involucrados son responsables de sus acciones.

Además, la seguridad de esta cadena de bloques es máxima, porque la información contenida en cada bloque es imposible de cambiar y está protegida por criptografía.

El blockchain entonces es una manera simple pero ingeniosa de pasar información de A a B de una forma totalmente automatizada y segura.

El proceso empieza mediante la creación de un bloque que es verificado por miles, quizás millones de ordenadores distribuidos alrededor de la red. El bloque verificado se añade a una cadena, que se almacena a través de la red, creando no sólo un registro único, sino con una historia única. Falsificar un solo registro significa falsificar toda la cadena en millones de instancias. Eso es virtualmente imposible.

 

Inmutabilidad

La inmutabilidad, en el contexto del blockchain, significa que una vez que algo ha sido introducido en la cadena de bloques, no puede ser manipulado.

La razón por la cual el blockchain obtiene esta propiedad es la de la Función hash criptográfica.

La palabra inglesa “hashing “alude al proceso de generar un output de extensión fija, a partir de un input de extensión variable. Esto se logra mediante el uso de unas fórmulas matemáticas denominadas funciones hash (y que se implementan como algoritmos hashing)”.

En el sistema bitcoin hay que pensar en las transacciones como entradas (inputs) que se ejecutan a través de un algoritmo de hashing que da una salida (output) de una longitud fija.

El blockchain es, por lo tanto, una lista vinculada que contiene datos y un hash pointer que contiene no solo la dirección del bloque anterior sino también el hash de los datos dentro del bloque anterior. El hash es una función no invertible que mapea una cadena de longitud arbitraria en una cadena de longitud predeterminada.

Cada bloque contiene información del hash anterior y de ahí que cada bloque posea un lugar inamovible y específico dentro de una cadena. A su vez la cadena es guardada en cada nodo de la red que conforma el bloque de cadenas, creando una copia exacta de la cadena en todos los involucrados de la red.

Esto por lo tanto permite almacenar información que jamás se podrá perder, modificar ni eliminar.